Al reducir su presencia en tu vida, dejarás espacio para que aparezcan impulsos positivos, los que segregan sustancias en tu cerebro que te hacen sentir bien.
Educación y relaciones familiares: La crítica constante, las expectativas poco realistas de los padres o cuidadores, y las comparaciones desfavorables con hermanos o pares durante el desarrollo pueden contribuir al surgimiento de estas voces críticas internas.
Diferénciate de tus pensamientos Para eliminar pensamientos negativos es aconsejable establecer una distinción entre el pensador y el pensamiento, es decir, entre mi Yo consciente, capaz de generar multitud de pensamientos diferentes, y el pensamiento concreto que se está produciendo en mi mente.
Tu crítico interno no es algo a lo que temer, sino algo a lo que comprender. Esa voz en tu cabeza puede sonar dura, pero a menudo tiene sus raíces en viejos miedos, heridas del pasado o creencias obsoletas que ya no te sirven para ser quien te estás convirtiendo. La clave no es silenciarla con fuerza, sino suavizarla con compasión y curiosidad.
La conciencia plena, o mindfulness, es una técnica poderosa que te ayuda a estar presente en el momento real y a observar tus pensamientos sin juzgarlos. Cuando te vuelves consciente de tus pensamientos negativos, puedes elegir no identificarte con ellos y dejar que se vayan.
Y si ya eres propenso a los episodios de angustia y tristeza, un lenguaje corporal equivocado disminuye tu capacidad de conectar con tus seres queridos, amigos y compañeros de trabajo, incrementando tus emociones negativas.
El pensamiento negativo tiene un vínculo con la actividad cerebral. Tanto es así que según diversas investigaciones del Instituto Nacional de Salud Mental se comprobó que existían muchas diferencias entre un cerebro de una persona con pensamientos positivos y otro con pensamientos negativos. De esta forma, principalmente se observó que estos pensamientos tenían los siguientes efectos en las personas. Reconfiguración de las redes neuronales: Uno de los principales efectos de los pensamientos read more negativos es la reconfiguración de la estructura de nuestro cerebro.
Los pensamientos negativos pueden afectar significativamente nuestra calidad de vida, limitando nuestras acciones y generando emociones desagradables.
Más probabilidades de tener una enfermedad psychological: Es obvio que uno de los principales motivos por los que las personas quieren cambiar los pensamientos negativos, es precisamente por el vínculo que estos tienen con las enfermedades mentales. Contra más frases de pensamientos negativos tengas en la mente, las probabilidades de tener más problemas mentales como la depresión, la ansiedad, o el estrés aumentarán.
Nuestros pensamientos negativos no se pueden borrar o eliminar, se deben reformular por enfoques más saludables.
, puedes probar a cambiar el marco y enfocarlo así: “Me parece que estoy afrontando ciertos retos que me están exigiendo mucho pero estoy en el camino de hallar soluciones”
Establece límites con la rumiación: La rumiación constante sobre pensamientos negativos puede aumentar su impacto. Establece un tiempo limitado para reflexionar sobre ellos y luego cambia tu enfoque hacia actividades positivas.
Pero lo que podría ser un mecanismo de supervivencia sensato en la infancia puede convertirse en una discapacidad verdaderamente debilitante en la edad adulta (Chamine, 2012).
El ejercicio físico ayuda a combatir la ansiedad y el estrés. Las investigaciones han mostrado que durante el ejercicio se liberan sustancias químicas que provocan un efecto equivalent a algunos ansiolíticos y antidepresivos, pero sin efectos secundarios.